La humanidad en la encrucijada. Hacia una transición alimentaria: por qué y cómo abordarla.
AEFA está presente mediante Camino García, directora de relaciones institucionales y comunicación de AEFA, en la reciente jornada organizada por la Fundación Foro Agrario y el Foro Interalimentario que ha tenido lugar el 31 de octubre Instituto de la Ingeniería de España en Madrid.
Con el título «La humanidad en la encrucijada. Hacia una transición alimentaria: por qué y cómo abordarla«, en ella se realizaron varias ponencias muy interesantes acerca de los problemas y soluciones derivadas de la necesidad de incrementar las producciones alimentarias para poder abastecer a una población en constante crecimiento. El mensaje claro fue que para solucionar la demanda alimenticia será importante apoyarse en la tecnología y la ciencia, y aplicado al sector de los fertilizantes, la necesidad y evolución hacia el uso y desarrollo de fertilizantes menos químicos y más respetuosos con el medio ambiente, actividad en la que podemos decir que las empresas pertenecientes a nuestra asociación son punteras.
El Futuro de la Alimentación y la Agricultura. Tendencias y desafíos
Estas jornadas atienden sensibilidades que afectan a la alimentación humana en un futuro inmediato. Y como ejemplo de estos pensamientos según destacó el director general de la FAO, José Graziano Da Silva, en el prólogo de la reciente publicación ‘El Futuro de la Alimentación y la Agricultura. Tendencias y desafíos‘, la visión de este organismo debe ser la de “un mundo libre de hambre y malnutrición, en el que la alimentación y la agricultura contribuyan a mejorar las condiciones de vida de todas las personas, en especial de las más pobres, de forma económica, social y ambientalmente sostenible”.
La persistencia de una población de cerca de 800 millones de personas que sufren hambre y desnutrición, junto con “las amenazas que plantea el cambio climático, la intensificación de los desastres naturales y el aumento en las plagas y enfermedades transfronterizas, nos muestran la necesidad de adaptación ante los grandes cambios que están sucediendo en los sistemas alimentarios globales”, destaca Da Silva.