El esparcido a voleo consiste en una técnica de distribución de semillas o fertilizantes lo más uniformemente posible, sobre una superficie de terreno de cultivo destinada a la producción comestible, forrajera, ornamental o de espacios verdes.
En el caso de las semillas, se diferencia de la técnica de siembra localizada, a chorrillo, a golpes o en líneas, como una técnica de distribución arbitraria, que se realiza arrojando puñados de semillas al aire con una cierta cadencia a la vez de combinada con los pasos del agricultor u operario.
Esta operación, por la cual se aplican los productos con un tamaño homogéneo, puede realizarse de forma manual, al azar o mediante equipos mecánicos más o menos sencillos.
Este método se habrá que calibrar previamente para establecer la velocidad o el paso de avance del operador, determinando así una densidad requerida por superficie según la dosis establecida.
Con ello se consigue adecuar un plan de abonado en el caso de los fertilizantes o de la densidad de siembra según la variedad y el manejo del cultivo.
Al voleo de precisión
En el ámbito de la agricultura de precisión, se han desarrollado equipos con cierta tecnología que permiten automatizar y dosificar con mucha precisión la densidad aplicada por superficie.
A partir de un mapeo de las parcelas o áreas a cubrir, se establece un esparcido al voleo donde se controlan completamente todos los parámetros que intervienen en esta operación. Por ejemplo, la velocidad de avance del equipo de propulsión, la apertura de la salida de tolva, la velocidad de giro de los platos de esparcimiento, etc. Todo ello con base en una controladora digital que puede programarse a demanda de cada necesidad.